Argelia y nuestro vacuno de carne

La semana pasada se confirmó la mala noticia del cierre de su mercado para el ganado vacuno en Argelia, como parte de las consecuencias colaterales del acuerdo establecido entre España y Marruecos sobre la soberanía del Sahara Occidental.

A pesar de que a finales de marzo, la portavoz del Gobierno español, doña Isabel Rodríguez, declaró que la nueva decisión de España acerca del futuro del Sahara no tendría por qué afectar a las relaciones con Argelia, la realidad es muy otra y ya se empiezan a notar sus impactos en la esfera comercial.

As í, desgraciadamente ya es un hecho que Argelia cerró, de momento de forma definitiva, sus puertas a la actividad comercial con ganaderos y operadores comerciales españoles.

El país africano está entre los primeros mercados de vacuno español, seguido por Libia y el Líbano, y hasta el momento Argelia compraba alrededor de 20.000 toneladas de vacuno al año, que es una cantidad realmente importante para el sector.

Paralelamente el Gobierno de Argel, el primer proveedor de gas de España, también advierte sobre una posible subida del precio del gas a nuestro país.

España recibe gas argelino a través del gasoducto Medgaz, gracias a un contrato entre la multinacional energética Naturgy y la compañía estatal argelina Sonatrach, que tiene un peso muy significativo sobre el PIB español.

Sin embargo, ambos consorcios revisan desde octubre el contrato de suministro de este recuro energético a España, y se espera como resultado un aumento de su precio en el caso de destino España.

Paralelamente Argelia dirige su mirada, en lo que al gas se refiere, al mercado italiano, interesado en reducir su dependencia en este concepto de Rusia y también mira a Francia para realizar la compra de ganado vacuno, en sustitución de España

Ante esta situación, los ganaderos españoles debieron bajar el precio del ganado vacuno entre 20 y 30 euros en el mercado interno y se prevén, en razón de las nuevas circunstancias, próximos descensos.

El giro comercial tiene un claro trasfondo político y cómo ya se ha indicado está el reconocimiento por parte del presidente español Pedro Sánchez, del plan de autonomía del Sahara Occidental solicitado por Marruecos desde 2007 para tener soberanía sobre este territorio.