El Matadero de MERCAVALENCIA y una nueva polémica

La pasada semana MercaValencia comunicaba su nuevo acuerdo comercial de un contrato con la empresa Incarlopsa (Clemente Loriente), con el fin de aumentar la producción de carne de porcino para su procesado y exportación a China. MercaValencia busca ser el primer matadero español con certificación para poder realizar las labores de despiece de los porcinos y tras su congelación quiere poder enviarlos al mercado asiático, especialmente a China. Una certificación que aún no se posee y se está empezando a tramitar.

Esto implica que en breve al Matadero, para exportar a China, se le exige que la instalación para sacrificar cerdos se dedique exclusivamente a este tipo de ganado. Dejando de poder por lo tanto de dedicarlo a empresas que trabajen con carne de otros animales.

Por esta razón, la Asociación Empresarial Mayoristas de Carnes y Usuarios del Matadero de Mercavalència (AECAM) ha expresado su malestar por la mencionada firma. AECAM denuncia la decisión del mercado mayorista valenciano MERCAVALENCIA (49 por 100 de Mercasa y 51 por 100 del Ayuntamiento de Valencia) de la que acaban de tener conocimiento. La misma se ha adoptado sin haberles informado ni consultado previamente sobre su impacto. A los ganaderos y distribuidores que acuden allí para sacrificar a su ganado desde el año 1969, solo se les ha comunicado que, a partir de noviembre, no podrán utilizar para este fin las instalaciones de MERCAVALENCIA y tendrán que buscar otro matadero. En esta línea, se les ha propuesto que acudan a un matadero privado ubicado en  Burriana sin tener en consideración los costes y molestias que esto implica a las pequeñas y medianas empresas que han sido sus clientes durante años.

Actualmente, se sacrifican semanalmente en MERCAVALENCIA entre 200 y 300 cabezas de vacuno y equino. Transportarlas a Burriana y retornarlas a Valencia (ya que los clientes finales de este producto se encuentran en esta ciudad) para su distribución supone invertir en transporte adecuado para no romper la cadena de frío. También pérdidas considerables de tiempo que implican que sus productos resulten más caros y de peor calidad y sus empresas menos eficientes, lo que, sin duda, les hará perder cuota de mercado y hará que algunas se planteen el cierre. Además, fuentes del sector aseguran que la instalación de Burriana está saturada. No podría asumir de ningún modo la actividad actual del matadero público de MERCAVALENCIA.

Los empresarios afectados consideran que la propuesta no es aceptable ni desde el punto de vista económico ni desde la perspectiva ecológica por el aumento de contaminación que genera el transporte.

Para AECAM, la solución a este conflicto sería hacer unas instalaciones nuevas para vacuno y equino (ovino hace años que no se procesa), separadas e independientes en MERCAVALENCIA y adaptar las actuales al sacrificio de porcino.

Así, el mercado mayorista podría atender al negocio porcino con el que ha adquirido un compromiso. Pero la vez, seguir dando servicio público a sus clientes de siempre con instalaciones renovadas, en el primer caso, y nuevas, en el segundo. Según el empresario señor Ballester “hay espacio suficiente en el complejo mayorista para hacerlo y la financiación de la adaptación, para este crecimiento, de las instalaciones -de las que directamente se nos deja fuera-, depende, en gran parte, de fondos públicos”.