Previsible desastre económico en las ganaderías semiextensivas y extensivas

De acuerdo con la publicación digital CÁRNICA, las explotaciones ganaderas extensivas y semiextensivas se enfrentan a pérdidas millonarias debido a la sequía.

Hace falta que llueva pero las predicciones a corto plazo no muestran la llegada de ninguna borrasca, sino todo lo contrario, las predicciones son de sol y de subida de temperaturas, lo que va a seguir agravando la situación de sequía que está viviendo nuestro país.

Una situación ciertamente alarmante y que, entre otros, afecta muy directamente a las ganaderías sujetas a modelos productivos semiextensivos y, sobre todo, a modelos extensivos. Estas ganaderías se enfrentan a pérdidas millonarias.

La ausencia de lluvias provoca la falta de pastos, lo que está obligando a los ganaderos a tener que comprar pienso y forraje con la finalidad de suplir esta falta de alimento para los animales.

Esta situación, lógicamente, lleva consigo un considerable aumento del coste de la alimentación de la base animal en las mencionadas ganaderías tal como están advirtiendo desde las diferentes organizaciones agrarias

Así, desde ASAJA se  pone de manifiesto que “los pastos están secos y los ganaderos tendrán no sólo que buscar agua para que beba el ganado, sino también deberán recurrir a la compra de piensos con el incremento de costes que ello conlleva”.

Según la UPA “ya es  seguro que no habrá suficiente pasto disponible y que las pérdidas para los ganaderos afectados serán millonarias, pues tendrán que adquirir más piensos, que además siguen a precios muy altos, y también se verán obligados a  llevar cisternas a sus animales para que éstos puedan beber”.

Por su parte, La Unió de Llauradors augura que esta situación creará unas pérdidas de producción bruta de, al menos, el 20  por 100 de la producción, y pide que se adopten medidas urgentes como por ejemplo una ayuda directa por los costes adicionales de la alimentación a consecuencia de la sequía y también poden una autorización de oficio para permitir pasturar en parcelas sin afectar a la condicionalidad ni a las ayudas PAC.

Tal y como apuntan desde ASAJA, “aunque los precios de los cereales han descendido en los puertos, no ha sido así para los precios de los piensos, una situación anómala de la que únicamente sale desfavorecido el productor“.

“Esta es la realidad del sector”, ha asegurado el presidente de ASAJA CLM, don José María Fresneda, y pide al conjunto de la cadena alimentaria, en especial a la transformación y la distribución, “que tengan en cuenta la alarmante situación de los productores”, advirtiendo que “si desaparece el primer eslabón, tampoco se mantendrá intacto el resto de la cadena”.

Además, advierten desde UPA que también hay preocupación en el sector por las olas de incendios “que ya están afectando a zonas de pastoreo del ganado y que si la climatología sigue así puede llevarnos a una situación dantesca donde el ganado sea un afectado de primer orden”.