En el mes de enero cerraron en España 90 granjas de vacuno de leche

Como ha publicado el boletín informativo  de AGAPROL del pasado día 2 de marzo la subida del precio de las leche hasta los 0,599 €/litro no ha sido suficiente para frenar el cierre de casi otro centenar de explotaciones de vacuno de leche en nuestro país. En efecto, el pasado mes de enero trajo consigo el cierre de 90 granjas según el informe den entregas del ministerio de Agricultura hecho público el pasado 1 de marzo.

La sangría sufrida por el sector desde hace más de una década se ve acentuada año tras año y el ritmo de abandonos entre los ganaderos se sitúa en la escalofriante cifra de dos diarios.

En 2015 era 17.860 los ganaderos en activo y sólo tres años después esa cifra descendió hasta los 14.439 hasta llegar a los 10.577 con entregas registradas durante el pasado mes de enero.

Con este aciago panorama y la limitación al crecimiento del tamaño de las granjas que siguen en activo los problemas de abastecimiento cada vez están más cerca. En efecto, el Informe de Entregas de leche cruda del ministerio de Agricultura viene a confirmar lo que es un secreto a voces, el descenso de la producción en nuestro país es la tónica generalizada y consolidada desde hace más de un año.

En el mes de enero de 2023 se produjeron en nuestro país 621.538 toneladas de leche frente a las 633.934 que se recogieron en el mismo mes del pasado año 2022. El sector viene reduciendo su producción en rangos de entre el 2 y el 4 por 100 mensual desde hace más de un año y todo ello pese. Insistimos, a la subida de los precios.

Los descensos más contundentes registrados tras el verano del año 2022 hicieron saltar las alarmas entre las industrias que se lanzaron a cerrar contratos con los ganaderos ante el temor al desabastecimiento que, al final, se trasladó a los lineales en el mes de octubre.

La tendencia actual hace presagiar que la esperada subida de producción estacional de la primavera será este año una incógnita cada vez más fácil de contestar puesto que además de la reducción de producción viene acompañada de un descenso de la cabaña, el cierre de explotaciones y serias limitaciones al crecimiento de las que aún se mantienen abiertas.