La operación Yucatán y la carne de equino no apta para el consumo
Llueve sobre mojado. Recuerden, por favor, mi nota de la pasada semana: “Pegarse un tiro en el pie”; ahora, se escribe un nuevo capítulo. En efecto, este pasado fin de semana he sacado a colación, en el seno de mi actividad docente, el tema de la denominada “Operación Yucatán”.
Y lo he hecho, aunque se me revuelve el estómago, para mostrar a mis alumnos un ejemplo de hasta dónde puede llegar la capacidad criminal de ciertos individuos amorales de la especie humana. En este caso esta amoralidad criminal está ligada a una trama que ha incluido, entre otras cuestiones, el maltrato animal de equinos, en su máxima expresión, y la comercialización fraudulenta de carne equina no apta para el consumo humano.
El punto de partida de la mencionada trama residía en una explotación ganadera que tenía, desde el año 2019, restringida la entrada y la salida de equinos. La misma está situada en la provincia de Valencia y era utilizada de forma clandestina para ubicar equinos que eran comprados, como animales de desecho, en diversas zonas de España (el precio de compra era muy bajo, de unos 100 euros/cabeza o incluso nulo).
En la denominada “Operación Yucatán”, que ha desarticulado a esta organización criminal mencionada, han intervinido diversas Unidades de la Guardia Civil y ha contado con la colaboración de la Europol (así, por ejemplo, la Unidad Técnica de la Unidad Central Operativa del Medio Ambiente de la Guardia Civil prestó apoyo operativo a la Policía Federal Belga y también ha colaborado la policía de Italia).
Paralelamente la operación ha contado con el apoyo de la Dirección General de Agricultura. Ganadería y Pesca de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de la Generalitat Valenciana.
Cuando la mencionada explotación ganadera, en el marco de mencionada “Operación Yucatán”, fue intervenida se encontraron 80 caballos muy maltratados, que estaban en situación irregular, sin cuidados ni atención veterinaria, y afectados por distintas enfermedades. Uno de estos animales tuvo que ser sometido a eutanasia inmediata, el resto fue retirado y la explotación ganadera fue precintada (en este operativo se contó con la sección Técnico Veterinario del Servicio Cinológico y Remonta de la Guardia Civil y el Grupo de Caballería de la Agrupación de Reserva y Seguridad).
Desde esta explotación los equinos seguían dos caminos; por una parte algunos lotes de estos caballos eran exportados, por vía terrestre, por transportistas conchabados con la trama, en general en muy malas condiciones (sufriendo maltrato y sin agua ni alimento), a diversos Estados de la Unión Europea (por ejemplo, Italia y Alemania).
Por otra parte, otros equinos eran sacrificados en mataderos de la zona, falsificando veterinarios implicados, la documentación de los mismos y su carne llegaba finalmente a establecimientos carniceros especializados, que conocían perfectamente que era una carne equina no apta para el consumo humano, pero, aun así, la comercializaban.
En el curso de la mencionada operación la Guardia Civil también inmovilizó más de media tonelada de carne equina que la red tenía dispuesta para ser puesta a la venta al público (alterando, obviamente, su trazabilidad).
Hasta el momento han sido detenidos 35 individuos, entre ellos los cabecillas de la red, y denunciadas 6 personas jurídicas (se trata de individuos con derechos y obligaciones que existen, pero no como personas físicas, sino como instituciones o empresas, que son creadas por una o más personas físicas, para cumplir unos objetivos concretos).
Todas ellas son investigadas por delitos de pertenencia a organización criminal, maltrato animal, delitos contra la salud pública, falsedad documental y blanqueo de capitales (unas primeras valoraciones estiman que el volumen de negocio podría estar alrededor de los 4,5 millones de euros).
Lamentablemente, si en nuestro país, en España, los individuos amorales (es decir, los criminales, los ladrones, los sinvergüenzas, los “chorizos” y los similares), que tanto perjudican y desprestigian el correcto hacer de miles y miles de profesionales intachables ligados al sector agrario (agrícola y ganadero), volaran…tendríamos, sin duda alguna, serias dificultades para poder ver al sol.
Y menos mal que tenemos unas Fuerzas y unos Cuerpos de Seguridad del Estado que son, en general, además de ejemplares y ejemplarizantes, altamente eficientes y eficaces, que sino…
Carlos Buxadé Carbó.
Catedrático de Producción Animal.
Profesor Emérito.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!