Un fin de año muy caliente y unos principios de 2022 caliente y verde

En su pregón, publicado en el boletín de AGROPOPULAR el día 18 del presente mes, el prestigioso comunicador don César Lumbreras expone que aunque todavía quedan dos semanas para la llegada de 2022, toca hacer balance.

Y lo primero es destacar el panorama general de protestas y movilizaciones que hay en el campo. Llevamos ya un par de meses así, en un ambiente que recuerda al que se vivió a principios de 2020, cuando tuvieron lugar las tractoradas y manifestaciones más importantes de este siglo. Desde entonces, muy poco o casi nada han hecho Luis Planas y su equipo por arreglar la situación, que ha empeorado por la importante subida de los costes de producción.

De poco han servido los buenos precios que se han registrado en algunos sectores. La realidad es que la mayor parte de las explotaciones se encuentran en estos momentos por debajo del umbral de rentabilidad. Vamos, que están en pérdidas. No lo digo yo, lo dicen los datos del propio Ministerio de Agricultura, que señalan que la renta agraria por ocupado bajará este año casi el 5 por ciento. Durante los próximos días seguirán estas protestas, por ejemplo en el sector lácteo y en la provincia de Córdoba. A la vista de lo anterior, el inicio de 2022 promete ser muy caliente.

Otro de los asuntos de plena actualidad es también el Plan Estratégico de la PAC, el famoso PEPAC. Luis Planas ha dicho que se remitirá este documento a Bruselas antes de que acabe el año. Lo primero que hay que destacar es que se tratará del plan de Planas, porque dudo mucho que se atreva a someterlo a votación para que los consejeros “se retraten”, con la posibilidad de que algunos de ellos lo rechacen, para no quedar a los pies de los caballos ante sus propios agricultores y ganaderos.

Buscará Planas, eso sí, hacer alguna maniobra que le permita decir que el citado Plan ha salido adelante por “consenso” o asentimiento”, vaya usted a saber. Es la jugarreta que ha hecho a los consejeros en dos de las tres reuniones de la Conferencia Sectorial de Agricultura en la que se ha debatido esta cuestión. Y los consejeros han caído en esa trampa, bien por ignorancia, o porque han querido. Ellos sabrán. Y con las organizaciones agrarias no ha existido negociación al respecto.

Durante los primeros meses del año que viene la Comisión Europea deberá dar su visto bueno al PEPAC español y a los que presenten los otros Estados miembros. Será en el primer semestre, con Francia ocupando la presidencia del Consejo de Ministros de la UE.

Ya adelanto que será un semestre muy verde y, por lo menos aquí, en España, muy caliente.