La situación del mercado del porcino de capa blanca  

La situación global de precios y perspectivas del sector del porcino de capa blanca es realmente compleja. El mercado no perdona y así los precios del porcino de capa blanca en España han alcanzado la semana pasada su nivel anual más bajo. La oferta sigue al alza, tanto en lo que atañe al número de animales como a su peso. Por otra parte, las exportaciones siguen sin lograr alcanzar unos niveles que dar solución al mercado interior. Debe tenerse en cuenta que China ha ralentizado significativamente sus compras y ello origina una gran presión a la baja de los precios.

Desgraciadamente la situación en los mercados del porcino de capa blanca en la Unión Europea (U.E.) también es muy delicada.

Sintetizando la situación actual cabe decir que el mercado europeo continúa saturado porque hay un exceso de oferta y, además, los animales llegan al matadero con pesos cada vez más elevados.

Por otra parte, la mencionada ralentización de las compras chinas (que afecta a todos, obviamente), está generando una fuerte competencia interna dado que la demanda global es claramente insuficiente para equilibrar a la oferta. A ello hay que añadir que en algunas regiones de la U.E. la actividad sigue frenada por los problemas que genera la COVID 19.

La consecuencia  de todo lo expuesto es una fuerte presión a la baja de los precios. Ningún mercado europeo importante es ajeno a esta situación que comporta una clara erosión de los precios. Esta situación afecta, lógicamente a la rentabilidad de las explotaciones porcinas y del propio sector.

La impresión generalizada en la U.E. es la de que, en las próximas semanas la situación de precios bajos no tenderá a mejorar dado que la competencia dentro de los mercados de la carne de la Unión está generando la situación descrita.

A nivel mundial los precios de la carne porcina también bajaron, de acuerdo con el índice de precios publicado por FAO porque se encuentran afectados por la negativa evolución de la demanda china y también por una reducción de la demanda interna, especialmente la que sufrimos en la Unión Europea y en el resto de Europa.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *