Nuevo plan de gestión del lobo

Las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA han anunciado la semana pasada en un comunicado conjunto que el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) negociará «desde cero» un nuevo plan de gestión y control del lobo, «tal y como habían reclamado» las mencionadas organizaciones.,

El Departamento dirigido por doña  Teresa Ribera se ha comprometido, según exponen las organizaciones, a vincular la entrada en vigor de la Orden que incorpora al lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección (ESPE).

Así, el  Departamento dirigido por doña  Teresa Ribera se ha comprometido, según las organizaciones, a vincular la entrada en vigor de la Orden que incorpora al lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE) a la elaboración de una nueva estrategia nacional de gestión del lobo, que deberá ser aprobada por unanimidad.

Representantes del sector agrario han mantenido una reunión con el director general de Biodiversidad, Bosques y Desertificación del Miteco, don Jorge Marquínez, de la que salieron satisfechos, «ya que supone un giro de 180 grados en la postura del Gobierno en torno al nuevo marco regulatorio sobre la gestión del lobo«.

El nuevo plan de gestión y control del lobo deber garantizar la coexistencia con la ganadería extensiva, han precisado las organizaciones agrarias.

Asaja, COAG y UPA han insistido al Miteco que este proceso deberá partir de un análisis del número real de manadas y ejemplares que existen en España y establecer medidas concretas para facilitar la coexistencia del lobo con la ganadería: control poblacional, ayudas para prevención y compensaciones públicas frente a los daños, al margen del presupuesto de la Política Agraria Común (PAC).´

Sin duda, es una decisión acertada del MITECO, pero hubiera sido muy de desear, desde todos los puntos de vista, que antes de pretender adentrarse este Ministerio en el ámbito legislativo, en un tema tan complejo y que, obviamente, desconoce, se hubiera dejado asesorar  por las Organizaciones Agrarias y, sobre todo, por verdaderos expertos en la materia.

Ya sabemos que “la ignorancia es muy atrevida”, pero si el MITECO hubiera procedido, en este tema, de forma lógica y razonable, todos nos hubiéramos evitado disgustos y pérdidas de tiempo.