El Gobierno del señor Pedro Sánchez y el año 2050

El programa presentado, pura elucubración, no cabe duda que está fundamentado en los postulados del señor Bill Gates y en los principios establecidos por la Agenda de Davos y su Great Reset (Gran Reseteo) creado por el presidente del Foro Económico Mundial, el señor Klaus Schwab.

El documento de 700 páginas es una biblia de objetivos a largo plazo que pasan por aumentar el gasto público, subir los impuestos y crear nuevos eco-tributos bajo el pretexto de cuidar la salud de los humanos. Entre las decenas de medidas presentadas como «resilientes y sostenibles», se encuentra la de reducir el consumo de carne de aquí al año 2050.

El Plan 2050 para España nos intenta hacer ver que no comer carne es una idea genial por el bien de tu cuerpo: «Esta reducción de ciertos consumos no provocará un empeoramiento de las condiciones de vida ni del bienestar de la ciudadanía. De hecho, probablemente ayudará a mejorarlas. Numerosos estudios señalan que el consumo de carne de la población española es entre dos y cinco veces superior al recomendable, que el 55% cambia de móvil cuando el anterior que tenía aún seguía funcionando, y que el consumo de energía es muy superior al necesario», refleja uno de los apartados del informe de los denominados “expertos”.

En definitiva comer carne no natural no será una opción más, sino una imposición que viene desde Bruselas. La regulación del mercado de la carne traerá consecuencias nefastas; así, un buen solomillo, por ejemplo, subirá exponencialmente de precio y será un manjar solo permitido para las élites de Davos y las clases más pudientes.

Es cierto que el mencionado plan va en consonancia con las «nuevas medidas alimentarias ecológicas y sostenibles» que va aprobando la Comisión Europea (CE). Cabe recordar que recientemente, la Comisión Europea, como ya se expuso oportunamente en nuestra ÁGORA TRIBUNA reconoció el pasado 5 de mayo como nuevo alimento a los gusanos amarillos secos y autorizó su comercialización en la Unión Europea. Cómo quedo expuesto: los mencionados gusanos suponen una importante fuente en proteínas y servirá para «apoyar la transición hacia un sistema alimentario más sostenible».

Cabe espera que de aquí al año 2050, dado que hay mucho tiempo por delante, se reflexionará de forma adecuada y se tomaran las medidas adecuadas en función de las circunstancias del estado de los conocimientos.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *