Problemas para los niños del medio rural con necesidades específicas
Una vez más, el mundo rural, tan importante como bien se está poniendo de manifiesto a causa de la COVID -19, se ve y se siente discriminado en nuestro país.
En esta ocasión, FADEMUR Extremadura ha denunciado el abandono que sufren los niños y niñas con necesidades específicas que viven en el medio rural y pide a la Administración regional la puesta en marcha de un canal de interlocución con sus familias para prestarles la ayuda que tanto necesitan durante este periodo de confinamiento.
Y esto acontece precisamente cuando, atendiendo a una necesidad social perentoria, ya se ha autorizado el desconfinamiento de los más pequeños de las casas en el medio urbano, la realidad del mundo rural en lo referente a los menores sigue estando olvidada prácticamente en todo el Estado, incluyendo los problemas que, en especial, padecen las niñas y los niños con necesidades específicas.
Desde la federación extremeña lamentan que el sistema educativo actual no esté trabajando con los niños y niñas que requieren una atención personal especial y, sobre todo, la carencia de puntos de apoyo en el medio rural.
«Los padres y madres que tenemos hijos con necesidades específicas, como en los casos de autismo, asperger, hiperactividad u otras características especiales, no hemos recibido ni una sola llamada de los orientadores o especialistas de sus centros escolares. Los padres y madres no tenemos la formación necesaria y tampoco tenemos a nadie que nos ayude durante estos días de confinamiento que, además, son mucho más difíciles para ellos”, han denunciado en un comunciado.
En el medio rural, la frecuente mala conexión de internet y la falta de los pertinentes equipos electrónicos en casa complican todavía más las cosas a aquellas familias que cuentan con algún miembro que requiere una atención más personalizada. Por todo ello, FADEMUR Extremadura reclama que la Administración regional no abandone a las familias que tienen niños y niñas con necesidades específicas para no complicar aún más las cosas durante el tiempo que se prolongue el coronavirus.
Como ya se ha comentado, este mismo problema se registra en muchas partes de nuestra España rural, lo que añade un aspecto más a lo difícil que resulta, en múltiples ocasiones, vivir y laborar en él.
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