Carta abierta de ASOPROVAC sobre la situación del medio rural y los recortes en la PAC

La importancia de dar eco a las voces locales y abordar el desarrollo rural en la PAC después de 2020
La coalición rural y la coalición de regiones agrarias europeas, ambas representantes de los actores rurales locales (agricultores, propietarios forestales, actores de la cadena de valor rural, propietarios de tierras, cazadores y autoridades regionales), piden a la Unión Europea que apoye la diversidad de sus zonas rurales. Ello requerirá concebir una estrategia ambiciosa en pos del desarrollo de las zonas rurales dentro de la Política Agrícola Común (PAC) después de 2020, con un presupuesto adecuado en el próximo Marco Financiero Plurianual (MFP) y sin dejar atrás a las comunidades rurales en el Pacto Verde europeo.

Las zonas rurales europeas están seriamente expuestas a la amenaza del éxodo rural y la creciente brecha entre el mundo urbano y el rural. En 2015 casi tres cuartos de la población europea residía en zonas urbanas y las cifras podrían alcanzar el 80 % de aquí a 2050; por el contrario, el número de agricultores está en continuo descenso. Entre 2005 y 2016 la agricultura perdió 9,5 millones de trabajadores, casi un tercio de la mano de obra total del sector2.

Como representantes de las comunidades rurales nos preocupa sobremanera esta tendencia a la baja, que se ignora actualmente en la mayoría de los debates públicos. Las futuras políticas de la UE tienen que tomar en consideración la opinión de las comunidades rurales para crear un futuro más sostenible y circular, algo a lo que ya contribuyen estas comunidades. Las zonas rurales europeas necesitan unas perspectivas políticas claras que permitan poner en práctica intervenciones impulsadas desde el terreno y por la comunidad, adaptadas por tanto a las necesidades locales, a través de una gestión descentralizada y una ejecución a nivel regional. Por ello, la implicación de los actores rurales en la elaboración de las políticas resulta decisiva, especialmente en el contexto de la futura PAC, del Pacto Verde europeo, en el cual se incluyen la estrategia «de la granja a la mesa» y la estrategia de la UE sobre la biodiversidad para 2030, y de la visión de futuro para las zonas rurales. Sin estrategias ambiciosas ni medios financieros adecuados, la amenaza del éxodo rural rebajará las aspiraciones y repercutirá negativamente en el éxito de las políticas más importantes de la UE.

Unas ayudas públicas adecuadas

Con el fin de mantener la viabilidad y el atractivo de las zonas rurales como zonas de residencia, de trabajo y de visita, es primordial que se mantengan las ayudas públicas, como mínimo, al mismo nivel que en el periodo de programación actual (2014-2020). La CAP ha demostrado ser hasta ahora un instrumento efectivo para reducir la brecha entre las zonas urbanas y las zonas rurales. Por lo tanto, es fundamental contar con una financiación fuerte para el desarrollo rural y para la PAC.

Además, se deben mejorar las sinergias con otros fondos de la Unión. El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el Fondo Social Europeo (FSE) deberían invertirse en facilitar la creación de infraestructura apropiada, apoyar la prestación de servicios básicos y cercenar la división entre el mundo rural y urbano.
La estimulación del crecimiento y el empleo.

Para responder adecuadamente a las necesidades de los habitantes y fomentar el emprendimiento, han de mejorarse los servicios de asesoramiento y la transferencia de conocimientos centrados especialmente en las nuevas generaciones y la mano de obra rural, así como el aprendizaje continuo y el papel de la mujer.

Los servicios de asesoramiento y las redes de la PAC (el sistema AKIS inclusive) tienen el potencial necesario para ayudar a los actores rurales a apropiarse de la innovación y las nuevas tecnologías. Es primordial invertir en estos medios para impulsar la competitividad y la sostenibilidad.

Los esfuerzos en pro de la sostenibilidad

Los actores rurales desempeñan una labor central en la gestión sostenible y activa de las zonas en las que trabajan y residen. Por ello, debería brindarse la posibilidad de que se les apoye en esta tarea y se les recompense por la prestación de servicios ecosistémicos, como la mitigación del cambio climático y la conservación de la biodiversidad.

Se debería investigar en la retención, absorción y sustitución del carbono, prácticas que también se deberían fomentar. Al mismo tiempo, se deberían mantener las medidas específicas para las zonas con limitaciones naturales, ya que contribuyen a evitar el abandono de las tierras y a promover la biodiversidad, especialmente en las tierras agrícolas de alto valor natural. Por otra parte, la bioeconomía circular ofrece unas oportunidades únicas para apoyar nuevos modelos de negocio centrados en la eficiencia energética y la emancipación de las zonas rurales y sus cadenas de valor, convirtiéndolas en los líderes de la conversión y revalorización de los recursos.

La creación de resiliencia

Las zonas rurales revisten un gran potencial para generar valor añadido en beneficio de la sociedad y cumplir con las exigencias de la misma. No obstante, la mayor recurrencia de los riesgos presentes en los sectores agrícola y forestal afecta a la sostenibilidad económica de las zonas rurales e influye en la elección personal de desplazarse o permanecer en dichas zonas. Por ende, es de suma importancia mejorar el acceso a las herramientas de gestión de riesgos.

Debe adoptarse un enfoque centrado en el relevo generacional, si se quiere que las zonas rurales superen el desafío demográfico y sean viables en el futuro. Los jóvenes agricultores y las nuevas incorporaciones al sector deben contar con herramientas mejor adaptadas y con facilidades para acceder a la tierra, al crédito y a la formación.
En calidad de representantes de los actores rurales y de las autoridades regionales, la coalición rural y la coalición de regiones agrarias europeas desean enfatizar, una vez más, que las políticas europeas son centrales para cumplir las expectativas para con los agricultores, propietarios forestales, actores de la cadena de valor rural, propietarios de tierras, cazadores y autoridades regionales, así como los ciudadanos y los consumidores, como también son centrales para el desarrollo económico y el dinamismo de las zonas rurales.

Les saludan muy atentamente,

Olivier Allain Vice-president of Brittany Region in charge of Agriculture and Agriregion Coordinator
Fanny-Pomme Langue CEPF Secretary General
Jannes Maes President of CEJA
Juan Andres Gutierrez Lazpita President of Euromontana
Pekka Pesonen Secretary General of Copa-Cogeca
Karsten Maier Secretary General of UECBV
David Scallan Secretary General of FACE
Thierry de l’Escaille Secretary General of ELO
George Aman CIC President