Los ganaderos de Aralar y el Plan de Gestión de Pastos

Resulta interesante hacer una reflexión acerca de lo que está ocurriendo en una zona del País Vasco, porque, lamentablemente, este es un hecho que no es un caso aislado. En este caso, las autoridades locales desarrollan un plan de actuación en el medio rural sin contar para nada con los ganaderos afectados.

Concretamente la Mancomunidad de Enirio-Aralar acaba de ver la luz, después de las elecciones municipales y forales, un documento promovido por EHBILDU en el que, con la tan manida base argumental de la soberanía alimentaria y de la preservación del medioambiente, se construye una argumentación temática que se fundamenta en que en esta zona hay un exceso de ganadería. 

Obviamente ello exige, según el mencionado documento, una reducción drástica de la misma (lo cual técnicamente no se ajusta a la realidad de esta sierra dado que el ganado que actualmente se ubica en los pastos está en perfectas condiciones de condición corporal al igual que las praderas), una reordenación de las txabolas, una amortizando las txabolas de los mayores, una recolocación y una reubicación de las restantes, la reforestación de algunas zonas, el cambio de algunas ordenanzas y la generación de algunas subvenciones.

Es cierto que en la zona, al igual que en otras muchas zonas del Estado, se pone de manifiesto el problema de un envejecimiento del sector pastoril y de una carencia de relevo generación pero el abordaje de este complejo problema, que va indisolublemente unido al del despoblamiento del medio rural, no se resuelve “matando al mensajero”.

Y así, el pasado domingo, en la fiesta de Ardiki en Zaldibia, los ganaderos a Aralar subieron al escenario para poner de manifiesto su rechazo frontal al la de Gestión de Pastos desarrollado por EHBILDU sin contar para nada con ellos que son los realmente protagonistas y afectados.